Un mural que acaba la frase "Pan, Trabajo y Libertad" que no llegó a terminar el joven comunista almeriense Javier Verdejo hace 42 años porque fue asesinado, ha sido pintado por distintos colectivos que preparan el homenaje anual a este militante.
Próximo al lugar donde se produjo el crimen, el Centro Andaluz del Pueblo Javier Verdejo, Nación Andaluza, el PCPA-PCPE y Almerienses por la República, han realizado esta pintura con la que se pretende recordar que cuatro décadas después "no ha habido justicia" con este suceso que marcó el inicio de la Transición en Almería.
Francisco Javier Verdejo Lucas fue un estudiante andaluz de Biología de la Universidad de Granada y militante de la Joven Guardia Roja de España (JGRE), organización juvenil del entonces incipiente Partido del Trabajo de España (PTE), de ideología maoísta. Era hijo de Guillermo Verdejo Vivas, alcalde de Almería durante la dictadura franquista, y procedía de una familia conservadora, conocida y respetada en la ciudad.
Verdejo fue asesinado por un guardia civil, pero la versión oficial que acabó imponiéndose es la de que éste tropezó con su arma, a resultas de lo cual salió un disparo que acabó con la vida del joven comunista.
En el entierro de Javier Verdejo miles de jóvenes se concentraron en la Plaza de San Pedro exigiendo justicia por el asesinato del joven. Hubo varias muestras de dolor, como las coplas de Rafael Alberti, tituladas Coplas a la muerte de Javier Verdejo, y una exposición de acuarelas y un poema por parte del acuarelista Jorge Castillo Casalderrey. El cantaor almeriense José Sorroche le dedicó una canción. En Granada, Juan de Loxa escribió los versos: "Pan y Trabajo, siempre se escapa el tiro pa los de abajo, que mala pata no les saliera el tiro por la culata".
Fuente: Noticias de Almería